Venido de las míticas tierras, orientales, nos llega el particular arte de la animación japonesa. Lleno de leyendas locales, de historias sobre honor y luchas entre el bien y mal. La isla que una vez fuera inexplorable, ferviente de secretos históricos y con una sociedad cerrada al resto del mundo durante siglos, entrega desde hace 50 años su visión particular de entretenimiento. Pero hay mucho más detrás del animé que un par de estereotipos clásicos sobre Japón.
Es parte de una dinámica digna de estudiar, la forma en que avanzó por lugares a los que no estuvo destinado desde un principio. Colmado de regionalismos, verdadero desafío de traductores, de una estética y forma que se pueden identificar de lejos, aún así logró meterse en las casas de millones de niños, a miles de kilómetros de distancia. Y en algunos casos especiales, ganó su corazón.
Aunque parezca increíble, empezó de a poco, muy poquito por estas latitudes americanas. Lejos del cosplay, de conceptos como otaku o, siquiera, sin que nadie supiera que era manga o animé. De la mano de clásicos atemporales que rompieron totalmente la brecha horaria de 12 horas. Los invito a prepararse alguna infusión y leer su historia conmigo.
El animé empezó a ser importado lentamente, con verdaderas joyas de su género. Las historias solían ser simples y aún cercanas al concepto de cartoon estadounidense, pero con un sentido de continuidad y profundidad que aquellos pocas veces alcanzaban. Además, venían empapados de una cultura completamente diferente a la que enarbolaban los yankees. Generalmente, centrada en el mundo nipon, o en todo caso, con civilizaciones globales donde la diferencia de nacionalidad nunca estaba del todo clara. Quizás, una profecía antigua de la globalización, aún por venir.
Hablamos de dibujitos, como se los llamaba usualmente, de la talla de Astroboy, Heidi, Candy Candy, o el famoso Meteoro, llamado realmente Speed Racer. La forma de consumirlos era totalmente distinta a la actual o incluso a la de hace 15 años. Una transmisión semanal, en algún canal para el afortunado que pudiera permitirse verla. Llegaban además con años de retraso, en el mejor de los casos si no eran décadas, con traducciones y doblajes que los más puristas del futuro tildarían de herejía.
A pesar de todo eso, la buena respuesta de su joven público no se hizo esperar. Toda una generación de niños, y no tanto, estaba pendiente y disfrutando de aquellas fantasías de distancias remotas. Las hicieron parte de su vida y de su infancia, aún sin saber que eran, de donde venían o cómo se llamaban. De esa forma gente como mi tío Jorge se hicieron adeptos de Meteoro, y sellaron el comienzo de una relación muy especial con el animé, que se extendería incluso a sus hijos en años posteriores.
Eran los primeros pasos, allá por finales de los 70’s, pero ya vislumbraban un brillo especial que no tardaría demasiado en llegar de la tierra del sol naciente.
Expansión Masiva
La primera oleada había pasado y dejado un gran número de fanáticos, o al menos, de televidentes contentos con aquellos programas que hoy en día, esconden un pedacito de su infancia entre capítulo y capítulo.
Pero el público se renueva, y así también lo hicieron las series. A las ya nombradas, se sumaron éxitos como Kimba, el León Blanco (que tiene todas las cartas para ganar la demanda a Simba de El Rey León), Mazinger Z, y una miríada de otras más que cada vez pedían más y más sus espacio en las pantallas. Mención especial a Robotech, que abrió aún más camino a punta de futurismo distópico y mechas.
Mientras, en Japón se estrenaban las series que una década más tarde revolucionarían a toda una juventud. Dragon Ball, Saint Seiya, localizado como Caballeros del Zodiaco, Sailor Moon. A esa santísima trinidad se coló también Ranma 1/2 entre muchas otras que terminarían golpeando con fuerza en los 90’s, cuando fueron importadas a nuestras latitudes.
No hay forma de contar la historia del animé latino, sin hacer hincapié en la tremenda explosión que esas series produjeron. Pero tampoco podemos olvidar a los medios que las trajeron, especialmente porque su recuerdo es tan pintoresco y anacrónico, como las historias contadas en ellas.
En Argentina, The Big Channel (subsidiaria de Cartan) comenzó con la tarea, contando entre sus particularidades que también pasaban una serie de Sonic, el erizo azul de SEGA. Pero será uno de sus canales hermanos, Magic Kids, el que pondrá un claro énfasis en la animación japonesa. Los que por aquel entonces éramos niños , seguramente recordaremos al menos media docena de animes de la casa, aunque no tuviéramos ni la más mínima idea de que era un anime por aquel momento.
Simplemente disfrutábamos, nos charlábamos y enamorábamos de cada una. Dicho sea eso, el Magic contaba con un programa llamado «El Club del Anime«. Polémicas aparte, allí se aglutinó en un momento a Leandro Oberto de Lazer, mítica revista dedicada a la cultura japonesa, y se pasaron cosas como Slam Dunk, Detective Conan, o Supercampeones (Captain Tsubasa).
Llegó el auge de las figuritas y los muñecos, los álbumes y el «late, late, nola, late» de cada recreo encontrando las más difíciles. No sabíamos de donde venía todo aquello que nos encantaba, pero igual le dábamos duro y parejo. Tampoco sabíamos que su llegada estaba muy relacionada, al menos en Argentina, con una compañía de juguetes, Jocsa, y un programa de videojuegos y otras variedades para chicos que muchos recordarán: Top Kids. De allí vendría después la famosa crítica «esos animés hechos para vender muñequitos«, presagiando una ruptura que tarde o temprano llegaría.
Auge y Quiebre
En esos tiempos no sabíamos que era un otaku: todos veíamos Dragon Ball Z, las chicas Sailor Moon, y eso por nombrar a los dos grandes representantes. Porque hubo toda una parafernalia pegada al animé. Los episodios, estrenados a cuentagotas en ciertos casos, se comentaban por la escuela y eran alimento de innumerables charlas. Alcanza con mirar en cualquier página de Internet y contar cuantos usuarios se llaman Gokú, Vegeta, o derivados similares.
Fueron años dorados de expansión para algunos, sobre todo los más chicos. Pero para otros, entre los que me incluyo, lo mejor estaba por venir aún. Siguiendo la clara estela que dejaba Magic Kids, muchos más canales similares se abrieron trayendo tanto lo mejor de Japón, como otras animaciones de varios lugares del mundo. Fox Kids, que estrenó Digimon, Cartoon Network con el bloque Toonami, y especialmente con Pokémon, que causó toda otra rebelión infantil alcanzando la masividad y los medios, a tal punto que hasta tu abuelita conocía a Pikachu (en serio).
Con el éxito también llegaron algunos vicios, traídos inclusive por series que se negaban a morir aunque ni sus creadores quisieran continuarlas, como le sucediera en su momento a Dragon Ball. Ante el agotamiento, la repetición de ideas, y el inexorable paso del tiempo que no sólo marcaba a las series sino a sus jóvenes televidentes, nuevos proyectos nacieron con la idea de mostrar y demostrar que el animé era mucho más que battle shonen interminables al mejor estilo DBZ.
Locomotion. El nombre merece a mi entender una oración sola para él, y debería hasta dedicarle un artículo aparte, al igual que a Lazer, Top Kids o El Club del Animé. Despacito, fue importando series nunca antes vistas, no sólo de la lejana isla, sino bizarreadas impresionantes como The Head, South Park o Duckman, provenientes de la escuela yankee. Desde sus cuarteles generales, Loco le dio aire a cosas simplemente inéditas para la zona, con la ayuda publicitaria del los más arriesgados en el medio.
Y es que, realmente, tener 12 años y que tus viejos te encontraran viendo Locomotion era como poner I-SAT o Space de noche, if you know what I mean. Equivalente a agarrarte con las manos en la masa (nunca mejor dicho) viendo pr0n. No sólo ya por la cantidad de ecchi y hentai que pasaban, sino por la temática claramente enfocada en un público adulto, maduro, y sobre todo con buen gusto. Para muestra, un botón video:
Hablamos de palabras mayores en el Animé, sobre todo el que entra en la categoría de clásico atemporal. Akira, Serial Experiments Lain, Ghost in the Shell (AKA lo que se robó Matrix), Evangelion (AKA lo que se robó Guillermo del Toro para Pacific Rim, pero sin todo el trasfondo filosófico/moral/psicológico) y Cowboy Bebop, verían la luz de los rayos catódicos, de miles de adolescentes y niños latinoamericanos por primera vez. La apuesta era fuerte y complicada, ya que se tocaban temas muy subjetivos como la religión, la edad y las cosas adecuadas para consumir dependiendo de ella.
Como espectador, puedo decir sin lugar a dudas que Locomotion trajo algunas de las mejores cosas que vi en mi vida, con respecto a la animación. Fuera desde los cortes publicitarios que parecían hechos bajo la influencia de un buque entero cargado de ácido, fuera desde las temáticas maduras y las series diferentes a lo que se veía en cualquier otro lado, Locomotion fue el único canal que al verlo, me trataba ya no como un niño que al que debían gustarle los pokemones o Gokú. Me trataba como un ser humano, pensante y racional, que podía masticar cosas un poco más complejas. Ni hablar de los cortos de todas partes del mundo, como el francés Jolly Roger que recordé por diez años, hasta que Internet se apiadó de mí y pude verlo de nuevo.
Por primera vez, el animé no llegaba sólo como entretenimiento, sino como arte. Arte desde las bandas sonoras impecables de Cowboy Bebop, que aseguro y me juego lo que sea a que es la mejor Original SoundTrack de la vida mundial. Arte desde las preguntas existenciales nunca respondidas en Evangelion. Parecido a lo que me pasó cuando tuve mi primera sesión de Rol a lápiz y papel… no había vuelta atrás. No para mi, ni para tantos que aún recordamos el canal.
Lamentablemente para el devenir de los hechos, sí que había vuelta atrás para el tiránico billete, que casi todo lo puede. Y aquel gran momento del animé latinoamericano, con fuertes representantes en cada uno de los grandes canales, sería una breve época dorada que tendría que terminar. Un alto precio a pagar por aquella ruptura que tanto disfrutamos.
Caída y Actualidad
Mientras más se acercaba el calendario a la mitad de la década del 2000, más se notaba un estancamiento en el animé. Las enésimas repeticiones de Dragon Ball o los Caballeros, o las interminables temporadas de Digimon y Pokémon, se hacían presentes. Había poca inversión de los grandes canales en cosas nuevas, y las que traían eran, una vez más, battle shonen que querían copiar fórmulas ya conocidas. A Yu-Gi-Oh! me remito, por ejemplo.
El sentido de pertenencia de la palabra animé también cambió. Como dije, toda una generación creció con dibujos de nipones. Sin embargo, las subsiguientes empezaron a tratarlo de forma más alejada, y sus fanáticos se enarbolaron debajo de la bandera blanca y roja. Ya no era cosa de todos, sino cada vez más, de unos pocos. No me cabe duda de que eso tuvo mucho que ver con el estancamiento de las buenas y nuevas series, y con el nacimiento del medio en el que hoy sobrevive y se nutre el animé latino.
Hablamos claramente de Internet, en donde pueden verse las series completas, muchas veces traducidas y subtituladas por puro amor al arte de sus seguidores.
El fin de los canales para niños y las locuras exitosas como Locomotion tal vez no tuvo que ver con Internet, pero sí que comparten una época temporal. Poco antes de su cierre, Locomotion había cambiado su logo y slogan por «Animestation«, quitando gran parte de las series o cortos provenientes de cualquier otro lugar que no fuera asiático, o al menos corriéndolas a horarios más inaccesibles. Poco después sucedió el golpe que sería un ejemplo de la caída K.O. que estaba por venir.
(Superáme ése Opening, por favor, ¡y con música original eh!)
El 31 de Julio del 2005, a las 6:00 de la mañana, Locomotion dice ser «tomado» por una organización fundamentalista del animé. Bien a su manera, era la forma de cerrar su ciclo y darnos a entender lo que estaba sucediendo en realidad: eran comprados por Sony Pictures, que reemplazaba la señal por Animax. Lo recuerdo no sólo por haber buscado la fecha exacta, sino por haberlo visto mientras pasaba en vivo. Casi 10 años después, me doy cuenta de que fue una de las cosas más Becoming of Age (volverse grande) que me pasó.
Cablevisión no había comprado los derechos de Animax, por lo que mi pantalla pasó de Locomotion, a una carga de estática constante e infinita. Me trato de imaginar con mi cara de 15 años, cambiando de canal y volviendo a ponerlo, y comprobar que efectivamente, ya no estaba más. Ni volvería a estarlo nunca, salvo en la memoria.
Por surrealista que suene mi anécdota, es una metáfora patente de lo que pronto sucedería en los demás canales. El animé que definiera las tardes de una generación, llegaba cada vez menos, sin irrupciones, sin originalidad. Animax fue digno sucesor de Locomotion, sólo por un tiempo, en el que estrenó algunas cosas dignas de mención como Death Note. Luego empezó con la debacle de los refritos, y hoy en día, es un canal hiperyankee que pasa realities. Como MTV, más o menos. Los que habíamos visto a Loco, sabíamos desde esa noche de Julio a dónde apuntaba la cosa.
¿Me Verás Volver?
La originalidad quedó relegada al ciberespacio. Allí, los jóvenes y no tanto se reunían y le daban el soplo de la vida a sus series favoritas, ya que nadie más se encargaba de traérselas a sus televisores. Nació así el concepto actual de otaku latino. Como si fuera una especie de copista de la Biblioteca de Alejandría, que cata y guarda el conocimiento de su afición. Que se reúne en eventos de cosplay, imitando en muchos casos a personajes que jamás salieron de una pantalla de TV, sino de PC. El animé pasó de ser popular y casi universal, a convertirse poco a poco en algo pseudo-sectario.
No es su culpa realmente, y están en todo su derecho de mantener viva la misma cultura de la que yo mamé sin darme cuenta siquiera, sin ponerme un rótulo sobre la cabeza, sólo porque me encantaba. Es por eso que se me hace tan paradójico que cuando el movimiento otaku es más fuerte y se lo ve con más actividad que nunca, yo no vea más que puras repeticiones de DBZ Kai por la noche del Cartoon, porque poco más hay fuera de Internet.
Y a veces cuando hablo con los jóvenes otakus, y cambiamos un poco de tema, que siempre por algún motivo tiene que ver o con ecchi o con Lucky Star o derivados, se me hace difícil explicarles cómo me siento y que representaba antes, cuando yo tenía sus 15 años, el animé.
¿Cómo le explica el abuelo al nieto lo que era el Tango, el salir a encararse una mina y bailar con ella en un local porteño, mientras sonaba la orquesta de fondo?
¿Cómo le dice el padre al hijo lo que era la sensación de sacar un vinilo de la funda, y hacerlo sonar por primera vez?
¿Cómo le hace entender el hermano mayor al menor, lo que sentíamos al abrir y oler la caja de ese CD nuevo?
No lo sé, realmente no lo sé. No sé cómo explicarle a alguien que las tres sensaciones recién descritas, nada tiene que ver con lo que se siente al reproducir o descargar un archivo de audio. Tampoco sé cómo explicarle a ellos.
Solamente me reconforta el saber que en la red de redes se mantiene algo de su esencia, aunque las publicaciones tanto de revistas como televisivas vayan en descenso o sean francamente nulas comparadas con lo de antes.
Tal vez como decía Soda, Me Verás Volver, aunque ya no sea el mismo, y la emoción de esperar y comentar haya cambiado por la inmediatez del click, y el comentario online en lugar de la charla entre amigos. Aún así, celebro a los copistas del animé, a los cosplayers con su buena onda, y a todos los que comprenden lo que significó esa palabrita para tantos de nosotros en nuestra infancia, aunque no sean como la mía. Mi tío con Meteoro, mis primos con Dragon Ball, mis sucesores con Death Note.
Quizás, sea todo cosa mía y de mi imaginación, ya me estaré volviendo viejo. Y por eso, aunque el animé algún día vuelva, ya no será lo mismo para mi.
Con ojos rasgados de nostalgia, recuerdos y animé. «Volver… con la frente marchita, las nieves del tiempo platearon mi sien…«.
lei hasta la parte de que invitas a prepararme el cafecito…… a ver esperame un cachito….
liistoooo… a leerlo todooo
Excelente nota, me hiciste acordar de tantos momentos en los recreos del cole, en grupitos de 5 o 6 chicos, todos euforicos «cheee viste south park, putean mucho» o «uhhh anoche se trasnformo en super saiyayin!!!!».
Tambien me paso algo parecido a compartir ese momento con mis hermanos, 10 años mayores que yo, y quedarnos a las 7 de la tarde mirando DBZ o que me adelanten lo que paso porque ellos si tenian derecho a quedarse despiertos y, por sobre todo, a «adueñarse» de la tele.
Otra euforia escolar fue descubrir Locomotion y los horarios nocturnos de I-Sat, I kown that you mean
muy buen articulo ! y te tiro uno de mi infancia «el niño marino»
Byron, muy buena nota, me encantó.
Yo estoy preparando algo para que mis hijos vean y sientan ese poder que el anime nos da a todos, ven sonic, heatcliff, un anime de momias (momias aqui, asi se llama), el anime de mario bros, y una copia fea de lo que era bugs bunny y amigos. estoy preparandoles una maquinola con XBMC para conectar al televisor y que vean toda la serie de goku, sailor moon, sacura card captor y los caballeros del zodiaco. con eso ya tengo para un año de anime al menos.
el cafecito mas delicioso que probe hasta ahora… muy buen post, si bien yo pude experimentar y conocer esas series de grande (menos Dragon Ball, porque yo tambien naci en el planeta vegeta ) me siento muy privilegiado de conocerlas y disfrutarlas..
Cuando iba a 5to grado tenia un amigo que al que no lo dejaban acostarse tarde. Yo todos los dias eseperaba a las 00 para ver el capitulo «estreno» de DBZ, terminaba el capitulo y a la cama. Al otro dia, a las 7:30 formando la fila para entrar al salon, me hacia la misma pregunta: que hicieron hoy? y yo le contaba, con mi capacidad de resumen, cuantos kameha habian hecho, que magia nueva habian mostrado, que malo nuevo habia aparecido y el me esuchaba como si le contara un cuento. No importaba si al medio dia iba a ver la repeticion del capitulo, la cosa era ser los primeros en verlo, en saber esas cosas..
El anime me acompaño siempre y todavia me sigue acompañando, sigo leyendo algun manga de vez en cuando, viendo las pelis de Hayao Miyazaki, leyendo cosas de Murakami e imaginandome los personajes como un anime.
Juego algunas peleas en la xbox con Naruto y me quedo como bobo con los colores, la cantidad de personajes, cada uno con su personalidad, mientras mis sobrinos miran aburridos y piden un show mas o no se que cosas.
Gracias Byron, nos vemos.
los 90’s la decada que nos conecto jajaja, si yo tengo 28 y tambien no se si es anime pero mire en the big channel FUERZA G estos https://www.youtube.com/watch?v=no7vXZ71eEs y tambien los halcones galacticos y thundercats o he-man o los centuriones pero estos no eran animes. pero bueno como digo eran los 90’s la decada donde tuve mi infancia y donde todo era mas inocente. en canal 7 o atc daban tambien ZOIDS y bueno en el magic slayers,bt x, patlabor en fox kids y en locomotion que me encanto mire baron rojo pero el final a los años lo termine en youtube porque en locomotion no lo dieron, tambien ahi mire GIJOE.
Y todo lo anterior dbz, ranma1/2 (viendolo hoy re visionarios con tanto trabuco dando vuelta jajaja), saber marionnete J tambien lo vi en locomotion, supercampeones en el magic etc todo lo que comentaste lo vi y los intermedios de magic inolvidables estaba mr go, cocomiel etc. y en cuanto a la musica tambien MTV era bueno en los 90’s tambien much music que miraba el gordo libersky, navegando con fede y el countdown jajaja era otro tiempo pero bueno todo cambia decia la cancion gracias por el post saludos.
Maestro, no se como pero leerte es como leerme, y si, Locomotion fue el mas grande «abridor de cabezas» y fundamentalmente, de buen gusto.
Que agradezco tanto que haya llegado en el momento correcto.
yo soy un poco mas grande, vivi el apogeo de los mechas y por vivir el interior y no tener canales de aire teniamos cable aunq muy limitado. Aun asi en algunos canales chilenos y venezolanos pude ver en mi infancia capitan harlock, ulises XXXI, mazinger, grandizer, robotech, cobra, akira, lupin, heidi, las aventuras de tom sawyer y huckleberry fin, la de los 2 ositos de mierda q era mas triste q bambi. La de la abejita viajera. Era buenas epocas para ser chicos. Yo ya era adolescente cuando llegaron dbz y los caballeros. Lime jodido super campeones por razones obvias y llevo en el recuerdo capitulos aislados de ranma. Ya de grande me decante por comprar vhs en el parque rivadavia y pasarle el cetro a mi hno menor en lo q es este arte, coboy be, evangelion, y muchas peliculas mas q series.. Consumi cuanto manga lanzo ivrea, fui a convenciones, jugue magic. Conoci a mi mujer y con ella disfrute grandes animes, casi todos recomendados por mi hno menor q se transformo en el especialista. Bleach, chobits, elfen lied, beck, y muchos mas q ya no me acuerdo. Ahora le toca el turno a mi hija, q tiene 3 y todavia no sale mucho de lo q es disney; pero sin dudas el tio, la madre y el padre haran lo necesario para q esta costumbre de disfrutar historias para adultos dibujadas por ponjas con ojitos gigantes no muera en nuestra familia. Estoy casi seguro q hasta cosplay voy a hacer con la nena, porq uno crece pero en el fondo nunca deja de ser chico.
slds
Nose cuanto tendras de edad pero creo que cerca de la mia, tambien soy del interior y vi todos esos animes en esos canales que mencionas; tambien vi una de carrera que la pasaban en el canal 2 de la plata (hoy America) por cable que se llamaba Grand Prix alla por el año 1986. Tambien via el programa de lambetain en ATC que pasaba «dai apolon» y ni hablar de mazinger. Saludos me hiciste acordar un monton de cosas de mi infancia
Genial como siempre, me siento identificado con todo esto.
Siempre quise ver Cowboy Bebop (puede que empiece a mirarla aunque me haya spoileado el final sin querer :(), pero en aquella época a mi tv de 30 canales no le llegaba Locomotion. Cuando iba a lo de mi hermano miraba algunos animes como Saber Marionette y no muchos más.
Los de Magic me los miré casi todos! Ranma 1/2 entre mis favoritos de todos los tiempos.
Y sí, esos tiempos no volverán. »Vivir con el alma aferrada a un dulce recuerdo que lloro otra vez.»
Que maestro, que recuerdos!!, si bien recuerdo I-Sat por you … ;), recuero que grababa a las noche en VHS Lupin III , que era un poco mas subido de tono… también vi todas las series e incluso tengo guardado varios de los primeros tomos de la revista Laser como recuerdo de esa época, que increíble yo tampoco podría explicar lo que sentía en ese momento a los pibes de ahora!
Igual la que me marco para siempre fue Macross y Saint Seiya. =)
Hola. Alguno se acuerda el nombre de la revista con la que distribuían los VHS en Argentina sobre anime. Pasaban la publicidad en el canal Magic Kid. Yo tengo la peli de Ghost in the Shell de la revista. Si alguno se acuerda le agradezco la dato.
tambien me acuerdo de las peliculas de los sabados a las 22 de la noche en america 2 jajaja ademas de las de isat eran los 90’s
No me esperaba un post así en este blog. Todavía recuerdo cuando tenia mi blog sobre estas temáticas. Pero por falta de tiempo y plata se cayo el host y no lo levante mas.
Un grosso Byron! Siga así!
Samurái x…
De esos yo vi: mazinger z, los supercampeones y los caballeros del zodiaco. Ademas vi: robocop, los halcones galácticos, thundercats, el show de la pantera rosa, looney toons, tom & jerry. Y para el final lo mejor: el show de Carlitos Bala, ea ea pepe
Excelente, y una sola cosa mas… Super Agente Cobra!
Loco, acabas de describir la historia de mi infancia! Todavia recuerdo llegar tarde a la primaria casi todos los dias porque miraba Dragon Ball mientras desayunaba. Lo daban en el Magic de 7.30 a 8.00 y eramos unos cuantos (diria medio colegio…) los que entrabamos tarde por la misma razon. En ese momento haciamos lo mismo que hoy hacen todos con las series los domingos a la noche o lunes a la madrugada: comentar el capitulo entre nosotros en el recreo y no spoilear a los que no lo habian visto todavia. Y la llegada de Locomotion fue una locura, recuerdo que ahi me paso que queria ver TODO y ya no tenia tanto tiempo; tuve que elegir, y algunas cosas que pasaban ahi, muy adelantadas para la television de la epoca, las pude ver mas de grande por internet.
Pero con el OST de Cowboy Bebop la historia es otra; si bien la serie es genial y me encanta, la musica de Yoko Kanno y The Seatbelts es de otro nivel y coincido en que es, por lo menos, una de las mejores bandas de los 90’s. De esas bandas unicas e irrepetibles, atemporales, que solo aparecen muy de vez en cuando. Es tan buena, que no necesitas conocer ni la serie ni el genero de musica que hacen para que te gusten. Hace unos años pude conseguir la discografia entera por algun lado y como laburo en radio, puedo darme el gusto de cada tanto pasar alguna cancion de ellos despues de una tanda o usarlas como cortina de fondo. Hasta ahora, la reaccion siempre fue igual, todos paran la oreja y el comentario mas comun, dicho por gente que ni conoce el anime, es «che, es muy bueno esto, quienes son?». Obviamente, una de mis bandas favoritas.
Gracias Byron por el texto, sos un groso chabon!
Soy un otaku, y feliz de serlo.
Cablevisión Tandil nunca tuvo locomotion así que tenía que consumir del Big, Magic, Fox Kids y después CN. No obstante siempre que viajaba a MDP o Bariloche, me internaba en la tele a ver solamente Locomotion. Si, vacaciones enterás en Bariló mirando Locomotion, te puedo resumir los capítulos de Serial Experiments Lain y Earth Girl Arjuna de memoria.
Cuando nombrás a Fox Kids podrías incluír más títulos (Shaman King, por ejemplo) porque ese canal le puso mucho huevo al anime, antes de que se lo compre Disney.
Locomotion y Animax nunca pasaron hentai, así como I-Sat nunca pasó porno. Rozando el límite pero sin cruzarlo.
Animax se convirtió en Sony Spin, calculo todos se enteraron. HBO también le dedicó/dedica espacio al anime, primero en el canal Cityvibe (en el momento que empezaron a sacar canales de la galera) y ahora que se dejaron de renombrar cosas, podés encontrar «pelis» de anime en sus canales (HBO Plus y MAX). En febrero 2014 le dieron lindo al anime.
Otros canales se asomaron al anime, como MixPlay.tv (quien te conoce), pero muy tarde (o muy temprano si lo mirás al revés).
Y un dato gracioso es Canal 9 pasando Doraemon «sin filtro». El anime parece pelotudo, pero se zarpa bastante para ser el dibujito antes de salir para la escuela. 1800 capítulos de un pibe buscando la forma de ver la ropa interior (o más) de la amiga y un gato pajero que lo ayuda (alta sinopsis).
Y no dejemos afuera al Super Sentai! porque los Power Rangers van a seguir entre nosotros for ever.
Byron, sos groso Sabelo.
Año 1999, pasamos de TDH a DirecTV y fue el parte aguas de mi adolescencia, fue el hecho de descubrir un genero que como bien decis, sin querer y sin saber ya estaba muy arraigado en uno. Que Dragon Ball, Samurai X y Los caballeros del Zodiaco eran particulas de algo mucho mas grande, diverso, nuevo.
El descubrimiento de Locomotion fue algo que me abrio la cabeza, literalmente. Quien no recuerda las series de anime, los intermedios donde pasaban videoclips de musica o experimentales, las secciones como Japanimotion o animafilms y el buen gusto, buen tino, o que se yo que tenian esas malditas propagandas que estaban tan bien hechas.
Todavia hace eco la propaganda de evangelion y la frase «mientras dios se quede en su cielo, todo en la tierra estara bien», carajo ver eso te daba ganas realmente de ver lo que el canal tenia para ofrecer.
Cuantos recuerdos…
PD: Prendanle velas al gordo casero que gracias a el pasaron Nausicaa del valle del viento en I-Sat en los 90!
PD2: Gracias oberto por hacernos cagar de risa con la revista lazer!
PD3: Mariela del carril gracias por sacarnos a Oberto de encima y conducir el club de anime!
PD4: Fue una puñalada en la espalda el cierre de camelot comics, justo cuando empiezo a agarrar envion con los mangas/anime/comics, lo cierran…
Que buen artículo, me cargo de nostalgia. El animé marco una parte de mi infancia y el pasaje a la adolescencia, me acompaño en ese proceso de «crecer» y aun recuerdo cosas de esas épocas con tan solo leer el nombre de alguno de los animes que pasaban en Locomotion, de repente ese canal fue el digno sucesor «del Magic» y significo, de algún modo, el pasaje de ser un niño a un adolescente. Que buenos recuerdos :’)
Me acuerdo la primera vez que me tope con locomotion, ver los capitulos de la serie yankee «The critic», los cortos que no entendía y que me volaban la cabeza! Quedarme hasta tarde a escondidas mirando alguno de los programas bizarros (no anime) que pasaba locomotion.
Mi primer ova!!! Oh my goddess, por dios. Agradezco haber podido vivir esa epoca de volver del colegio y, ver anime a la hora del te comiendo porquerias (Bubblegum Crisis Tokyo 2040 y Those who hunt elves).
Cuando mi canal de cable un dia sin aviso me quito Locomotion y yo como loco pasando canales esperando que solo haya sido una de esas reprogramaciones de grilla, para luego darme cuenta que no, me habia quedado sin locomotion, sin anime. Hasta le dije a mi viejo que llame al operador de cable para reclamar que lo vuelvan a poner, o que nos cambiemos de operador de cable!!!
Y un día, asi como si nada, aburrido pasando de canales reconozco un logo en la esquina superior derecha. Mis ojos no lo podian creer y tuve que quedarme mirando hasta el final ese capitulo del gordito que criticaba peliculas para caer en que habia vuelto, locomotion habia vuelto!!! Sali corriendo por toda la casa gritando algo, no me acuerdo que, y la felicidad volvio a mi televisor.
Capítulo aparte para la Lazer y el Lazer mail (epic).
La verdad, buenisimo el articulo, realmente fue una tristeza cuando Sony Spin termino de matar Animax, con su contenido pensado 100% en series y novelas del momento para adolecentes.
Tampoco hay que olvidar los Segmentos Toonami y Adult Swim en Cartoon Network, que si bien el segundo no fue de puro anime, tenia contenido bastante bueno!
Con amigos siempre nos planteamos la misma pregunta, ¿porque no hay canales de anime para ARG y AL?
digamos que el mercado es grande y este contenido no es «nuevo» como pordria serlo un deporte «nuevo» como el UFC, tiene historía y las empresas que doblaron a nuestro idioma durante mucho años
Ni hablar los animes generacionales, mis viejos son grandes y saben perfectamente lo que es «Dragon ball o Pokemon», son casí parte de la cultura moderna
Un saludo!
Espero el articulo especial de Locomotion.
Excelente articulo
Uhhhh que recuerdos!!!
Como no olvidar cuando nos juntabamos los compañeros de la carrera a ver Dragon Ball Z, GT , y cuando vimos casi con lagrimas en os ojos jejeje el ultimo capitulo de Dragon Ball GT , Adios Goku, hasta que nos volvamos a encontrar :’)
Claro que hubo tiempos mejores y esa extraña familiaridad con las series era calida, muchas veces llegaban a formar parte de la cultura popular y el excelente trabajo que hacian los actores de doblaje muchas veces consistia precisamente en adaptar las series a la cultura latinoamericana. Toda esa magia se ha perdido y como bien señalas el mundo del anime y manga es mas como de culto. Desgraciadamente las cosas cambian, para bien o para mal, en el caso de mi pais fue para mal; en Mexico el principio del fin vino con criticos de postura conservadora y mente muy cerrada que comenzaron a satanizar, literalmente, series (principalmente Pokemon) bajo argumentos de los mas absurdos por lo que las televisoras (como siempre manipuladas por el poder) dejaron de ofertar animes y no pasaban de repetir los mas conocidos (Dragon Ball Z y Saint Seiya). En años recientes han puesto en television algunas series de animacion japonesa muchas de ellas sin el mismo carisma de las de antaño o bien incluso producciones estadounidenses que imitan ese estilo de animacion igual sin mucho exito. Yo tambien espero que renazca el anime como algo con lo que ya estamos familiarizados.
Sobre el OST de Cowboy Bebop, pues si, es muy bueno, algunos temas no son precisamente mis favoritos pero la gran mayoria los disfruto, especialmente los temas de estilo jazz como el opening (Tank!), varias de las que aparecen en los episodios (Road To The West, Space Lion, Rush…) y el hermoso ending (Real Folk Blues).
Excelente articulo. Otro canalizador de nostalgia Jaja. No soy un fiel seguidor del anime pero estuvo muy presente en mi infancia y adolescencia, por nombrar algunos Detective Conan y Ranma 1/2 fueron geniales, como tantas series mas que vi en los canales de la época (magic kids! Que grande). Me impresiona como les pegó Locomotion a todos Jaja, pero bueno, era un canal copado y diferente, y fue el puntapié para un amigo que sí es digno seguidor de este arte, que todavía bebe de este mundo y cada vez que voy a capital me encarga que le compre tal manga ahí por Cabildo, etc. Yo en cambio me fui a lo superficial y me cope mas con south park y comentar en los recreos impresionado por como se puteaban, algo nunca visto jajaja, y también me empezó a gustar Miranda que en las propagandas pasaban el video de Bailarina. Ahh y las noches de I-Sat… se ve que eso era un secreto fácil de descubrir jajaja.
Muy buena nota; igual patinaste en lo de que Guillermo del Toro se baso de Evangelion para su Pacific Rim, o sea, como norteamericano de 50 años el pertenece a otra época, y como tal el nació con otras series mechas (las cuales eran mas distribuidas en su país); de hecho el no es de la época de Evangelion, si no de series como Getter Robo, de la cual es mas visible que el se baso; Pacific Rim tiene poco y nada de Evangelion (y si lo tiene no es por parte de Guillermo del Toro)
Por un lado, esto.
Todo lo expresado allí es verdad… Evangelion no inventó nada, mucho menos el género mecha. Pero sin lugar a dudas es la serie ícono no ya de los 90’s sino la más famosa del mismo genero.
Por otro lado, esto:
Que Del Toro se haga el inocente y diga que no hay inspiración de Evangelion, es simplemente irrisorio después de ese video. Ni hablar de la protagonista asiática con cabello azul, bien podría haberle puesto «Ier» en lugar de Rei Ayanami. Eso entre muchas otras cosas de ese link. Ah, por cierto, es mexicano, no yankee, si bien es norteamericano por posición geográfica, creo que todos sabemos bien a que país se refiere la palabra. Recién se mudó a Los Angeles en 1998 luego de vivir en Jalisco toda su vida, así que consumió el mismo animé que cualquier otro latinoamericano. Si tiene su inspiración por alguien más, como su guionista que es un fan declarado de la serie, mal por él igualmente. Si voy a escribir un libro de caballerías, debería de ver si mi obra no es un pseudo plagio al Quijote antes de publicarla, ¿verdad?
Bueno, para ser sinceros, ojalá se hubiera «inspirado» más. Le hubiera quedado mucho mejor la película, sería de culto ya, y no tanto pochoclo computarizado. Que si algo hizo Evangelion fue darle un vuelo artístico incomparable a un género bastante plano.
Más allá de todo eso… era un pequeño chiste o gimmick de mi parte, para dar a entender, de forma similar a la anterior comparación entre Ghost in the Shell y Matrix, que otra superproducción debe mucho de sí misma al género. Bien podrías poner «Robotech», «Getter Robo» o la que quieras ahí en lugar de Evangelion.
Un saludo.
Impecable. Describiste mi infancia y mi adolescencia al pie de la letra. Cuántos recuerdos… Gracias.
Soy de la epoca de Meteoro, asi que vale decir que soy viejo. Me senti totalmente identificado con como esta expresada la nota… no sabiamos lo que era, no teniamos ni idea de donde venia ni los codigos que se manejaban… ni siquiera sabiamos como se llamaba! Me costo muchisimo tiempo incorporar que Meteoro y Speed Racer eran lo mismo, o Robotech tenia algo que ver con Macross, asi como escucharlo en sus distintos doblajes (ingles y el japo original). Pero algo tenia que hacia que nos gustara igual! Nunca fui fan del anime, mas alla de algun consumo casual. Si recuerdo Locomotion por lo zarpado que era :).
Hay una sola cosa con la que no coincido con el autor… el «todo tiempo pasado fue mejor» del final. Me extraña, purrete! Tan «cutting edge» en sus gustos musicales, y tan retrogrado en su apreciacion cultural! Nada se pierde, amigo… todo se transforma. Deje de añorar lo que ya paso y aprenda a apreciar el porque de los cambios, que son lo unico constante en este universo. Mire para adelante!
Que memorias Dios mio!
Todo lo que escribes es como lo viví solo que le agrego que, a diferencia tuya, yo sigo viendo anime descargado de internet.
Genialidad este artículo, Byron
Genial!! Infancia y adolescencia perfectamente descriptas!
Les dejo una joyita:
https://www.youtube.com/watch?v=z4nTkdEpofg
Absolutamente identificado!, excelente artículo!
Hay un rumor de que vuelve locomotion….
si, confirmado, vuelven. Parece que sera una propuesta online.
por lo que leo yo no era el único que todos los días a las 00hs veía el capitulo estreno de Dragon Ball Z por Magic.
Hace algunos años, estaba recuperándome de una operación quirúrgica y como regalo divino de algún dios pagano, dieron un maratón de Robotech por el canal TCM. Best day ever!
https://www.youtube.com/watch?v=lMQ0gf-zGP4
Por todo lo que comparto del texto, Byron, podría comentar páginas y páginas, pero solo me pondré de pie y aplaudiré.
Genio.
*clap* *clap*
Muy bueno, sin palabras.
Dios! Acabo de leer todo el artículo creo que sin pestañear, la última parte donde tratas de hacer entender a la nueva «generación» haciendo esas grandes comparaciones hiciste que se me caiga un lagrimon…
Tengo un nudo en la garganta de tantos recuerdos juntos, todos plasmados de una brillante forma en cada palabra de este artículo!
Llegar corriendo del colegio para tomar la leche mirando sailor MOON disfrutando cada segundo de esos 30 minutos gloriosos para después salir corriendo a jugar con mi mejor amiga que se aparecía Luna y me decía que era una guerrera de la luna … En el único momento que mis hermanos y yo no peleabamos por la tele era cuando aparecía dragón ball y nos quedamos paralizados frente a la tele como 3 zombies, todo un respiro para mi mamá, hasta que terminaba y empezábamos a jugar a se super sayayines y uno termina llorando jajajajaja…
LOCOMOTION mi fase y transicion a la madurez…. El alma se me rompió cuando se fue…. Tiempo largo estuve hasta que me volví a reunir con este mundo nuevamente…
Me alegra saber que no estoy loca y que eso existió, que hay gente que lo recuerda con el mismo amor que yo…
GRACIAS por este magnífico artículo cargado de nostalgia, si pudiera te abrazaría por qué removiste en mi un mar de recuerdos más que hermosos!!!
Hoy en día estoy viendo un resurgimiento de las producciones de Anime en los nuevos medios, (la programación de TV ya casi está muerta, nadie ve cartoon network o canales de tv) Netflix está invirtiendo mucho en contenido anime, Crunchyroll está dando un catalogo muy grande y permite ver los capítulos un par de horas después del estreno en Japón. Ya no se trata de andar buscando en páginas ilegales para encontrar esos estrenos con subtitulaciones de pésima calidad; simplemente abro la app de Crunchyroll en mi teléfono y puedo ver el estreno de la serie que estoy siguiendo.
Creo que estamos en la nueva era del anime, anime legal vía plataformas de streaming
Hermoso relato me trajo muchos recuerdos.
Muy buen informe.
Eso si, te hare una gran corrección puntual:
Hubieron muchas mas series antes de Robotech, y esta abrió el mercado al anime solo en Estados Unidos, no así en latinoamerica.
Por estos lados, podríamos decir que las series que verdaderamente abrieron el mercado y pagaron un alto precio, son Caballeros del Zodiaco, Dragon Ball, Sailor Moon, y Ranma 1/2, con Cowboy Bebop y Evangelion dando el golpe de gracia final.
De hecho se menciona a Meteoro (Speed Racer), Candy Candy Astroboy o Heidi, se podrían incluir muchas otras más como La Princesa Caballero, pero ahí entramos en el terreno pantanoso de en qué lugares y años se estrenó cada cosa en particular. El «Breve» del título no es gratuito, sino muy descriptivo, y por el mismo se dejan en el tintero muchas cosas o apenas en una mención de una oración.
Tranquilamente da para varios libros la temática.