Raspberry Pi 2: de juguete a computadora personal

El 29 de Febrero de 2012 la Raspberri Pi fundation (una asociación caritativa regulada por la Comisión de Caridad de Inglaterra y Gales) presentaba al mundo la Raspberry Pi. Se trataba de una «placa computadora» creada específicamente para que los estudiantes puedan comprender ciertos conceptos informáticos que la misma informática se había ido encargando de sepultar a través de los años con la idea de «simplificar» la experiencia de usuario.

¿Y que había pasado realmente a través de los años? Bien, básicamente lo que sucedió es que desde aquellos años en los que para ser un usuario de PC había que hacer un curso y comprender – a la fuerza o con gusto – conceptos como «dispositivos de entrada», «periféricos», «unidades», «sistemas operativos», «comandos» entre tantas otros. Lo cierto es que, guste o no, la década del 80 y la primera parte de la de los 90 hizo que la mayoría de las personas que manejaba una PC conocía de una manera mas o menos básica cómo funcionaban. Por contrapartida, desde Windows 95 hasta la actualidad, el concepto de funcionamiento fue haciéndose cada vez más simplista y transparente con la noble idea de que cualquier ser humano pueda usar una computadora con el menor esfuerzo. Increíblemente, hoy tenemos usuarios que gracias a esta simpleza que se ha implementado saben manejar una computadora pero a su vez creen que la misma funciona debido a que hay un grupo de enanitos mágicos de tamaño microscópico que así lo permiten y lo peor es que muchos estudiantes de secundaria con programas académicos técnicos a los cuales los mismos profesores tenían dificultades para «explicar» lo que es una computadora debido a la complejidad actual de las mismas.

Una vez leí a un artículo de Ariel Gentile en la revista Power Users donde contaba una anécdota muy enriquecedora. Había conseguido un motherboard con una procesador 486 y necesitaba overclockearlo con el objetivo de poder reproducir MP3. Para ello debió conseguir un oscilador de cuarzo que oscilaba mas rápido y cambiarlo por el que estaba en el motherboard y solo así – porque en un principio no se hacía OC como ahora desde la BIOS o del OS – pudo tocar su canción favorita sin cortes. La interesante del artículo, además del aprendizaje, era que, con paciencia, alguien con ciertos conocimientos de electrónica podía «leer» la mayoría del circuiterío presente y que con el tiempo y gracias a la tecnología multi-capa presente en el PCB y los chipsets multipropósito se había vuelto imposible. Si a esto le sumamos un software transparente desde la BIOS hasta la capa de aplicaciones, tenemos un «alto nivel de tecnología» pero a su vez, muy pocos usuarios capaces de comprender cómo y porqué suceden las cosas que ven en una pantalla.

Raspberry Pi, justamente, llegó para «luchar contra el sistema». Y es que se trata de una placa que se creó con fines educativos y para que sobre ella se pueda jugar (en el sentido mas didáctico de la palabra) con la intención de divertirse aprendiendo. Además, uno de los objetivos de la fundación es que el precio de la misma sea lo más accesible que se pueda con el fin de llegar a la mayor cantidad de personas. Al parecer lo cumplieron con crecer porque a mediados del año pasado ya se habían vendido más de 4 millones de Raspberry Pi’s en el mundo (hoy superaron los 5,5 millones) y la popularidad de estas pequeñas seguía creciendo.

Pero, ¿fue realmente la necesidad de aprender las básicas de arquitectura de computadoras las que generaron que se vendan estas plaquitas a un ritmo de 17 por segundo? Eso es discutible. Se vendieron muchas RPi’s para educación, obviamente, pero además, se ha creado un nicho de uso de estas placas entre los entusiastas de la informática y/o geeks. Y es que esta pequeña se podía convertir en un dispositivo multiuso entre los que se han destacado crear un cliente de bittorrent que cunsume 5 Watts, un NAS, una retroconsola y la mejor: un reproductor multimedia basado en XBMC.

El Raspberry Pi original fue un hermoso remolino de aire fresco. Una invitación a «trastear» (si uso muchas palabras españolas es culpa de años y años leyendo sus revistas tecnológicas) con cables, memorias SD, instalar OS’s, meter mano en las configuraciones y demás. Sin embargo su falta de potencia lo limitó a «una computadora de uso limitado» y acciones como navegar por Internet se volvían una misión imposible, principalmente por el pequeño y limitado procesador. Algo obvio al fin de cuentas.

Raspberry Pi 2 y ARM v7

2 años después y un par de revisiones en donde la placa había logrado cierto mejoras, se lanzó el Raspberry Pi 2. Una placa de idénticas dimensiones físicas (un acierto para los que tienen carcasas y accesorios) pero con una arquitectura tan evolucionada que le mereció el «2» que lleva al final. Ah, y manteniendo el mismo precio que la versión anterior. Genial noticia para todos… menos para los que compraron la B+ hace poquito.

Especificaciones: 1GB de memoria RAM (vs 512 en la revisión B y 256 en la original) y un procesador Broadcom ARM 7 Quad Core corriendo a 900Mhz que quizás es el punto clave de esta nueva versión ya que el anterior procesador era ARM v6.

Y es que a diferencia de ARM v6, ARMv7 comprenden un conjunto de instrucciones mucho más rápido y robusto. Si bien las diferencias arquitectónicas son un tema muy complejo podríamos resumirlo cómo el típico caso del «procesador más moderno que tiene mayor potencia y eficiencia por ciclo de reloj». Además de todo esto que para muchos puede ser  aburrido, la gran noticia es que este salto generacional permitirá la llegada de varios Sistemas Operativos, entre los que se destacan Ubuntu y Windows 10, ambos de manera gratuita.

¿Esto quiere decir que vamos a poder armar una PC totalmente funcional por u$s 35? Estoy seguro que con este aumento de potencia va a ser posible que la Raspberry Pi 2 pueda satisfacer varios tipos de usos considerados «livianos» (cómo por ejemplo una caja registradora). Basta con ver algunos vídeos (1) (2) para notar que esta pequeñita va por muy buen camino. Pero habrá que esperar a que mucho software actual creado para ARM v6 se recompile para a ARMv7 para saberlo del todo aunque todo indica que estaríamos ante la primera PC barata y usable, solo el tiempo lo dirá…