Relatores para todos: lo que el futbolero añoraba

Todavía recuerdo cuando mi viejo puso cable en casa. Corría el año 1993 y en mi ciudad el «Rio Cable» era la nueva – y económica – opción para mirar televisión.

13 pesos costaba Río Cable. Menos de la mitad que Video Imagen. Una prestadora local que tenía varios años en la ciudad. Los nuevos supieron entender el mercado. Video Imagen se había transformado en una opción de lujo, dejando de lado a la mayoría de los clientes que solamente querían «los canales de aire de Buenos Aires y alguna que otra cosita más».

A pesar de valer 13 pesos, el abono de Río Cable por entonces tenía un as en la manga: el fútbol.

Yo fui testigo de las primeras emisiones de TSC (televisión satelital codificada) que comenzaron en aquellos años. Fui testigo del nacimiento de algo que ahora es masivo pero por entonces las transmisiones no cerraban los micrófonos en el entretiempo y los relatores se daban el lujo de irse al medio de la transmisión, como lo que hizo Araujo luego de un gol de «gardelito» Medero.

Rio Cable era barato, popular y con fútbol. En dos años, Video Imagen quebró.

Río Cable se hizo tan popular que con el tiempo fue adquirida por el grupo Cablevision. Con los años aumentó la cantidad de canales y el precio. Llegó MTV, Cinecanal, CNN, History Channel y la lista fue incrementándose paulatinamente. El precio fue creciendo paralelamente. Río Cable se estaba transformando en el cable que había «fundido».

Unos años después, empezaron a codificar algunas señales. Comenzaron con los canales para adultos. Luego el «pack premium» de películas (HBO y Movie City) y el platillo final fue el fútbol. Al principio fue sólo el clásico de la fecha pero el negocio era tan jugoso que fue sumando partidos, dejando solamente unos pocos, que por lo general eran de los equipos menos populares, en la grilla clásica. Aquella persona que amaba mirar fútbol debía comprar un decodificador – aunque en realidad lo daban en forma de comodato – o comprar uno «trucho» que funcionó bastante tiempo hasta que cambiaron el formato de codificación, ah, que tiempos.

Así estuvimos años. Fueron muy pocos los afortunados que tenían «deco» y los demás o nos íbamos a un bar a ver el partido o lo mirábamos por TV. Había relatos que mostraban la tribuna, era bastante triste.

Los que tenían decodificadores disfrutaban de unas transmisiones realmente fabulosas. El fútbol movía (bueno, mueve) mucho dinero y las empresas privadas a cargo, como Torneos y Competencias, realmente eran dignas en el servicio que ofrecían… a los pocos que podían pagarlo. Decenas de cámaras, super slow motion, calidad tanto de producción como de postproducción hacían de que los partidos sean muy disfrutables. Ah, y los relatores eran de los mejores que tenía el «mercado» por entonces.

Pero las cosas cambiaron. Por diversos factores que no es de mi interés tocar en este sitio a la transmisión del fútbol argentino la «tomó» el estado. Se llama fútbol para todos y desde que esto sucedió hoy es posible ver gratuitamente cualquier partido de primera división, desde el mas «rasca» hasta el clásico del domingo.

Puede llamarse una victoria para el pueblo porque de hecho, lo es, pero en el aspecto técnico Fútbol para todos apesta a varios niveles.

Son innumerables los detalles que podríamos tomar para criticar a FPT comparada con una transmisión «privada» así que, tampoco viene al caso. De hecho fue de público conocimiento que los encargados del proyecto se contactaron con un conocido empresario de los medios que tiene una gran empresa de producción para que le dé «el toque», pero no funcionó. Uno de los puntos claves eran los relatores porque… la mayoría no tienen la suficiente calidad a la que el televidente argentino siempre estuvo acostumbrado.

Quizás por eso el sitio web relatores para todos venga a ser una solución muy interesante para aquellos que preferimos otros relatores. La consigna del sitio es lograr el sueño de mi tío Hector que siempre quiso «mirar el partido por la tele mientras lo escucho por la radio» pero los problemas de sincronismo lo hacían imposible. El sitio logra, muy inteligentemente, aplicar el retraso que necesitemos para así lograr la sincronía perfecta.

Luego de algunas pruebas, es muy fácil dejar sincronizado un partido en la TV con el audio de la radio. Pido disculpas por la calidad del video pero en ese momento contaba únicamente con un smartphone, de todos modos se ve bastante bien lo GENIAl que es ver un partido con un relato de radio

El sitio web es muy sencillo, se pueden ver las diferentes radios que pasan el partido y aplicarle el delay.

Lamentablemente y por un tema de tecnologías de streaming (ya que ellos deben «bufferear el audio) no todas las radios están comprendidas entre las opciones de Relatores para todos. Ojalá en un futuro podamos contar con, por ejemplo, los relatos de Radio Mitre o Radio Continental.

La verdad, esta es una de esas ideas que hacen grande a internet. Una idea basada en una necesidad ¡Por mucho más Relatores para todos en el futuro!

Sitio web: Relatores para todos.