¿Tiene sentido la memoria DDR5 hoy?

En estos años donde la tecnología sigue avanzando a una velocidad constante y evoluciona como si el mercado así lo pidiera, existe algo que no avanza de la misma manera y es el consumo de estas nuevas tecnologías. El caso de las memorias RAM quizás sea uno de los ejemplos más claros al respecto. De hecho, hoy, 10 años después de su introducción al mercado (los primeros procesadores compatibles con este socket fueron los Haswell de Intel) la mayoría de los usuarios pueden ser felices usando una computadora con memorias DDR4 ¡10 años! Esto hubiese sido inimaginable en épocas anteriores, donde las transiciones de SDR a DDR y luego de DDR a DDR2, por ejemplo, fueron mucho más veloces y agresivas. El fondo, es, como siempre, la necesidad de velocidad.

Y si hablamos de velocidad, o performance, en la actualidad con 16 GB de memoria RAM DDR4 casi cualquier persona puede usar una computadora de una manera muy digna. Pero mejor pensemos en algo un poco más power entonces: Hoy, con un procesador de gama media o media alta de no más de 3 años más 64GB de RAM DDR4 a 3600Mhz y una buena gráfica es posible jugar a prácticamente todo, incluso en 4k a framerates decentes, por lo que ni siquiera estamos ante un evidente «cuello de botella» entre procesador, subsistema y memoria. No habría necesidad de una memoria nueva, al menos en escritorio, claro. Pero…

El rey DDR 4 ha muerto, que viva el rey DDR4

Si alguien me preguntaba un año atrás, a muerte le decía que compre un motherboard con soporte para memorias DDR4, pero las cosas cambian, o mejor dicho, el precio de las cosas nuevas bajan. Y eso cambia mucho la ecuación.

Así que, hace 1 o 2 años el tema era el siguiente: una memoria DDR4 de calidad, con velocidades de punta, y si es posible, con buenas latencias prácticamente no tenía diferencias sustanciales de performance respecto a las memorias DDR5 que había en el mercado. La gran diferencia, eso sí, era en el precio. Es decir, si uno quería armarse una PC con DDR5 tenía que gatillar:

• En un motherboard sustancialmente más caro (comparando gama con gama versus DDR4).
• Un procesador muy moderno (Intel 12th o 13th Gen o AMD Ryzen 7000).
• Los módulos de memoria per se, que eran un 50% más caros que los DDR4.

La pregunta entonces es, ¿por qué el mercado necesita memorias RAM más rápidas? La respuesta no te sorprenderá: es porque el mercado debe seguir evolucionando. DDR5 está desde hace varios años diseñada, implementada y demás como estándar, pero ha avanzado muy lentamente en su admisión en el consumo. Justamente por lo que venimos diciendo antes: la gente básicamente no la necesita porque con la que está en el mercado le alcanza y le basta. De todas maneras, es bueno conocer algunas mejoras que tiene la última tecnología de memorias por sobre su predecesor.

• DDR5 se creó con la idea de duplicar el ancho de banda de DDR4, reduciendo el consumo energético.
• DDR5 permite una mayor capacidad por módulo. Se habla de hasta 512GB por módulo cuando en DDR4 es 64GB.
• En cierto sentido, DDR5 es la continuación de DDR4, de hecho las velocidades de datos de DDR4 arrancaron en DDR4-1600 y hoy existen memoriras DDR4-4600 mientras que DDR5 arranca en DDR5-3200 y se extiende, hoy, hasta DDR5-6400, aunque se habla de memorias DDR5-8600 en el futuro.
• El mayor avance que trae DDR5 es que los módulos vienen con sus propios controladores de voltaje. Es así: antes de DDR5 al voltaje de las memorias lo manejaba el motherboard (los que conocen de overclock lo ven cómo algo demasiado obvio) pero a partir del nuevo estándar decidieron que cada módulo traiga su PMIC (controlador de potencia) que por un lado mejora la integridad de las señales y reduce el ruido pero por el otro, aumenta el costos de las memorias.
• DDR5 funciona con 1.1V (por defecto y sin overclock) es decir, 1 décima de voltio menos que DDR4.

Time goes by (y por qué deberías comprar DDR5)

Por más que DDR5 sea mejor, la realidad es que la mayoría de las personas sigue sin necesitarla porque «no es tan mejor que DDR4» o porque directamente, no necesitan algo tan rápido. Pero además, en comparaciones «mano a mano» la realidad es que tampoco se nota demasiado. En la mayoría de los benchmarks las diferencias de performance no supera 5% y muy pocos llegan al 7%. Pero el tema es otro.

El tema es si tu próxima PC va a tener DDR5 o no. Porque seguramente la actual tenga DDR4. Y ese es el quid de la cuestión.

Yo pensaría muy bien las cosas. Me explico: si sos un entusiasta que actualiza su PC cada par de años y hoy tiene una PC basada en AM4 o un Intel generación 8 o 9 y tienen mucha memoria RAM y de buena calidad, quizás lo mejor sea actualizar al mejor procesador AM4 o Core que puedan comprar sin cambiar tanto lo que tenés. Pasar de un Ryzen 5 2600 a un Ryzen 7 5800X3D se siente y muchísimo. Vas a notar que todo lo que hagan es más fluído y si le suman un upgrade de placa de vídeo, vas a tener PC para rato (y muy poco cuello de botella).

Ahora. Si no tenés PC y querés armar una de cero quizás lo más recomendable es comprar directamente un motherboard bueno con soporte DDR5 y las memorias rápidas que permitan el día de mañana un upgrade de CPU sin cambiar todo de nuevo. Mi recomendación va hacia AMD que tiene mucho mejor prontuario mantiendo los sockets que Intel y además, el precio de DDR5 ya no es tanto más que DDR4 sino que se van emparejando cada día más.

Estos son mis 2 – y cada día más devaluados – centavos​.

Escribí esto con mi Thinkpad T410 desde mi fábrica de cerveza mientras fabrico una Session IPA. Hay 35ºC. Así que espero que les guste.