NVMe: porque a partir de ahora los SSD’s se conectarán a través de PCI-E

Por estos lares solemos autoproclamarnos «evangelistas de los discos de estado sólido». Hoy parece un cliché pero esto es así desde hace años y es desde entonces que recomendamos fervientemente que en caso de querer hacer un upgrade instalar un SSD en la computadora (en caso de tener un HD magnético o convencional) y después agregar memoria RAM.

Después, y en caso de que sea necesario más velocidad, es probable que el upgrade deba ser de fondo y esto significa cambiar la plataforma (que incluiría motherboard y procesador, en caso de una PC de escritorio). Yo les puedo decir que – al menos en mi experiencia – más del 80% de los usuarios que me han consultado para hacer una actualización se terminan quedando con su PC actual con SSD y a lo sumo con más RAM. Por eso suelo tener 1 o 2 SSD’s para instalárselos a modo de prueba (obviamente a los amigos y/o conocidos) para que acepten, y lo hacen siempre.

Pero volvamos a los discos de estado sólido. En la actualidad con alrededor de AR$ 1000 es posible comprar uno de calidad – aunque no de demasiada capacidad – que nos permiten instalar Sistema Operativo, Programas importantes y alguna que otra cosita más (porque como dice el dicho, para todo lo demás está el disco secundario o externo). Además, en el mercado generalista ya contamos con varias opciones que varían principalmente en performance y los más avezados se atreven a armar RAID’s en los cuales, si el SSD de por si es rápido y los accesos son casi instantáneos, la velocidad se multiplica.

En esa realidad nos encontramos actualmente, en una especie de «meseta» donde casi todos están contentos con sus SSD’s (al menos los afortunados que cuentan con uno) y la mayoría de las críticas caen sobre la durabilidad de los mismos, punto en el cual si bien se ha mejorado, en promedio no suele ser el mismo que los discos rígidos «de toda la vida». Mientras tanto, lo que está sucediendo es que la velocidad de transferencia de los SSD’s actuales aumenta en mayor proporción que las revisiones del estándar Serial ATA.

Es por eso que el anuncio de Intel con su serie 750 de SSD’s es algo así como «subir un escalón» en el tema. Pero, ¿qué es lo nuevo que tiene Intel para ofrecernos? ¿Celdas mas rápidas? No, es el sistema de interconexión. Porque la clave está en la tecnología ya que de a poco los fabricantes están pensando en abandonar el puerto SATA (ideado principalmente para discos rígidos magnéticos) y se van volcando a nuevos sistemas que aprovechan al máximo el ancho de banda y la capacidad de transferencia instantánea de las memorias que pueblan los discos de estado sólido. NVM Express, NVMe y NVMHCI son acrónimos de estas tecnologías que utilizan el bus PCI Express para «conectarse» al sistema.

Esto de conectar un dispositivo de almacenamiento a través de un puerto PCI-E no es nuevo sino que tiene sus años.  Tiempo atrás hemos visto implementaciones donde se usaba una placa que contenía sticks memoria RAM como por ejemplo el DDR Drive X1 o mejor aún, algo bastante similar al producto de Intel fabricado por OCZ, el Z Drive. Fueron pioneros, pero a su vez, eran carísimos y por lo tanto quedaron marginados al pequeño mercado de los entusiastas que podían pagarlo.

Intel 750 Series: Un SSD PCI-E con futuro en el mercado

Conectado a un puerto PCI-E 4X (3 generación) este ¿disco? puede transferir datos a 2400 Megabytes por segundo hacia el sistema y escribir a la mitad. Impresionante. El proceso de fabricación de las memorias (NAND FLC) es de 22nm y son exclusivas de la compañia. Por cierto, ¿vieron la facha que tiene la placa? es digna de lucirse en un gabinete con ventanita.

Según las pruebas de Intel y varios benchmarks que hay dando vueltas la velocidad del SSD tope de gama de esta nueva familia de Intel es hasta 4 veces mas rápido que un SSD convencial. Es tan rápido que en algunos análisis hasta lo apodan «Insano» y tiene sentido. La ¿placa? más grosa de todas tiene 1.2TB de capacidad y un precio de alrededor de u$s 1000. Parece mucho, pero estamos hablando casi de 1 verde por Gigabyte. Pasa que es mucho muy grande…

Además de esta bestia, la familia se compone por una versión de 400GB a u$s 339 y luego vienen una serie de SSD’s que comparten los chips NAND de memoria. Estoy seguro que la versión de 400GB va a hacer mucho ruido en el mundo de los entusiastas del hardware ya que tiene con qué.

Este tipo de tecnología es «lo que se viene». Todavía estamos en la transición SSD > HD’s que se va acelerando gracias a la baja de los precios en los SSD’s convencionales (wow, ya decimos esa palabra). Todo lo que es NVMe es tecnología bleeding edge y lo será por bastante tiempo pero es muy bueno saber hacia donde nos vamos moviendo. Eso si, para que una computadora «arranque» desde uno de esos bichos habrá que tener un motherboard basado en el chipset Z97 o X99 y Windows 7 64 BITS como mínimo.

La era de la tecnología de almacenamiento conectada a través del puerto PCI Express ha comenzado. Larga vida al rey SATA que reinará por varios años más hasta que este príncipe lo reemplace en una transición muy suave y agradable. ¿Será SATA la última interfaz diseñada exclusivamente para conectar periféricos de almacenamiento? Todo parece indicar que si, aunque a la vez a nadie parece importarle.