Para aquellos que viven debajo de una roca informática, Blizzard, empresa desarrolladora de videojuegos, creadora de obras maestras como Warcraft, Diablo, Overwatch y demás, viene de un mes de sinuosas experiencias.
Sucede que hace aproximadamente un mes, esta empresa decidió castigar a un jugador de Hearthstone (su juego de cartas) por haber dicho en cámara el lema central de las protestas democráticas de Hong Kong. No solo le prohibió un año poder jugar, si no que le canceló todos los premios. Y no solo a él tampoco, si no que despidieron de manera inmediata a los 2 entrevistadores (taiwaneses por cierto).
Internet (o al menos Reddit), explotó en ira y en furia.
Cancelaciones masivas de cuentas históricas, difamaciones, memes, todo lo que un activista de teclado te puede ofrecer.
Sucede, que china es un mercado inmenso, de miles de millones, con una clase media en constante crecimiento. Una clase media que ostenta en consumir todo lo que occidente puede ofrecer. Siendo los videojuegos uno de los mercados más fuertes. Y, en china decir «liberen a Hong Kong, lucha de nuestros tiempos», es tan tabú como en argentina decir las islas Malvinas son inglesas, o no fueron 30000 los desaparecidos.
Blizzard, en una encrucijada moral y económica, tuvo que decidir si dejaba pasar este episodio, que seguramente le iba a traer problemas con la gente y el omnipresente gobierno chino, o reaccionar de alguna manera u otra.
Reaccionar reaccionaron e Internet reaccionó a su reacción.
Blizzard dio un leve retroceso y decidió devolver los premios, y cortar la suspensión de un año a medio año.
Pero, esta dualidad entre la moral occidental (usualmente libertaria, de decir cualquier cosa), contra la moral oriental del PCC (usualmente controladora de coartar el discurso), llevó a las empresas norteamericanas a replantearse su rol y su forma de dar los mensajes.
Lo más lamentable de este episodio, es lo rápido que pasó al olvido.
Pues sucede que el activista de teclado, como buen Milenial, tiene memoria e intereses de corto plazo. Todo lo que pueda darme endorfinas hoy es superior a cualquier lucha o postura moral.
A todo esto, un mes luego, sale la Blizzcon (la conferencia anual de Blizzard) mostrando a la empresa a toda marcha, anunciando monstruos como el Diablo 4, Overwatch 2 y una nueva expansión de Wow. Lamentablemente nada sobre el remaster del Warcraft 3.
Internet pasó de ira y furia al festejo. Demostrando lo poco que realmente interesan e importan estos episodios de ira temporal. Dejando un precedente de que tiene que hacer una corporación para complacer a los dos demonios.
Es triste, irónico y cínico a la vez. Como nuestra generación toma tanta identidad en luchas que abandona a las semanas.
Pero después de todo, que le podemos pedir a una empresa de videojuegos, más que videojuegos.
Aunque, debo reconocer que en esta transición del videojuego al e-sport me preocupa darle el poder de decisión a una empresa que busca y fomenta ganancias, por encima de una organización independiente que busca y fomenta el deporte.
Total, cualquier tipo de feedback negativo, puede y será tapado con darle al público lo que te vienen pidiendo.
En esencia, Blizzard deja el precedente que podes mandartela con tu público, que mientras les des un huesito, el perro va a volver agitando la cola. Y nuestra generación deja el precedente, de que todas las protestas que vengan de un teclado, son fugaces, simplistas y necias.
Internet una vez más se toma el afán de quedar en ridículo, y mas que un par de memes no quedaron de este episodio.
Y al final de la nota, me cuestiono, si acaso el rol de ejemplo moral que le estamos pidiendo a corporaciones de videojuegos, es el rol que realmente le debemos dar.
Son corporaciones, en un capitalismo. Lo último que nos deben dar es un ejemplo moral.
«Pues sucede que el activista de teclado, como buen Milenial, tiene memoria e intereses de corto plazo. Todo lo que pueda darme endorfinas hoy es superior a cualquier lucha o postura moral.»
Jajajajajajajaja te amo Narzo.