Por Matías Calderon Bourband.
No acostumbro a escuchar la radio, pero el sábado por la mañana andaba en auto y puse Radio 10 (creo que era Radio 10). Lo que me hizo dejar ahí fue que mientras surfeaba por el dial escuché «Facebook» y quise saber qué decían. Era un programa de unas mujeres que no tengo idea de quienes son.
El tópico: la privacidad en Facebook, los peligros que acarrea, y todo eso que leemos bastante seguido por estos días en Internet o vemos en informes televisivos alarmantes.
Entrevistaban a un psiquiatra, muy ubicado, parecía saber del tema, especialmente por el lado de qué es lo que nos lleva a compartir información en Facebook u otros servicios.
Pero las frases redundantes acerca de los peligros, las amenazas, el conectarse con desconocidos, y anécdotas de usuarios a los que les robaron la casa después de publicar «información sensible», arruinaron otra posibilidad más de echar un poco de luz e informar verdaderamente, hasta (¿por qué no?) educar, acerca del manejo consciente y correcto de nuestra información en la web.
Es más fácil hablar de cuánto nos están vigilando y qué malo es todo, que decirle a esa persona que está escuchando o viendo que en realidad aún tiene el control sobre su información y los servicios que utiliza; que puede borrarse cuando quiera, compartir información con quien desee y no compartirla con quien así no lo quiera; que puede elegir, que aún a Internet no la gobierna ningún ojo que todo lo ve.
(Imagen Joy of tech)
Es obvio, lean, OBVIO, que si uno comparte la información de TODA su vida privada (y los hay, parece que a varios sólo les falta publicar fotocopia de primera y segunda hoja del DNI) el uso de tal o cual red puede tornarse peligroso para esa persona. Pero que existan personas que comparten sin tapujos hasta el plano de su casa no quiere decir que todos seamos así; y sí, quiere decir que son personas que necesitan ser educadas. Ahí está la clave, educación. Porque sino todo se transforma en un cuento sin fin, aburrido y sin profundidad.
El punto en toda esta cuestión está en el uso que se le da a la herramienta. Si ponemos un poco de esfuerzo en descubrir la mejor forma de utilizar la web y las herramientas de ella, sin sensacionalismos, nos vamos a ver beneficiados.
Sí, Facebook, un blog, Twitter, flickr, todos pueden tener un peligro potencial acarreado por el uso incorrecto. Entonces, busquemos la manera de elegir mejor. De elecciones se trata, y tomamos mejores decisiones si tenemos mejor información disponible.
Lo que apunta Dans hablando sobre Google Latitude sirve para cerrar éste post:
El miedo a lo desconocido es una caracteristica natural en los seres vivos. La inercia, la resistencia a cambiar el estado de reposo o movimiento, también lo es. Pero ¿no empezamos ya a ver como enormemente cansinas este tipo de reacciones? Independientemente de que el programa venga o no de Google y de que esta empresa encarne para algunos una terrible amenaza, las menciones a los «terribles peligros» que plantea no resisten un análisis con una mínima seriedad, y se repiten puntualmente cada vez que aparece una nueva tecnología. Todo es malo malísimo, todo es una amenaza, todo está lleno de peligros. ¿Se puede pedir a la sociedad que tenga una actitud favorable al progreso tecnológico cuando desde los medios se les alimenta con sensacionalismo y falta de rigor?
Matías Calderón Bourband es un estudiante de Relaciones Internacionales y bloguero de Paraná, Argentina al que podés leer en su blog, Twitter o Código Geek.
con facebook, twitter, etc… es mucho más preocupante que alguien que te conozca se entere de algo que no querés que se entere, que la posibilidad de que venga la CIA, un grupo de secuestradores, un megamillonario que necesita un hígado y quiere asesinarte o un mafioso italiano que te robe la identidad o un grupo de pibes chorros que quieren robar tu casa.
Es más probable que tu mamá vea esa foto en la que estás fumando de una pipa de agua, o que tu novia entre al facebook de tu ex y vea una escena que vos juraste que jamás pasó, o que tu jefe descubra que no estuviste enfermo, sino de parranda. O que te de una depresión crónica por ver el facebook de tus ex compañeros de secundario y sus exitosas y maravillosas vidas. O que tu «cita a ciegas» googlee tu nombre y descubra que sos gordo y feo, y no se presente.
ESOS son los verdaderos «PELIGROS DEL FACEBOOK»
Vos sabes que yo tambien escuche justo la radio que hablaban de eso, y pense lo mismo que vos.
Eso te pasa por escuchar radio 10. ESO es más peligroso que facebook, twitter y osama bin laden juntos. Pero menos que Bush.
Si no fuese xq sé que mi amiga no reenvió el mail, podría asegurar que este post está basado en un mail larguiiisimo que le escribí hace unos días en ocasión de una cadena que anda circulando sobre los «peligros de facebook».
Coincido totalmente con lo que se dice acá; creo que como siempre, meten a todo el mundo en la bolsa.. a ver, no hay que ser superdotado para darte cuenta que si ponés tu teléfono, dirección de casa y Estado que diga «me fui de vacaciones, la casa está sola» más vale que se te van a meter chorros…
Pero bueno, la prensa necesita de esto para rating, la sociedad necesita de esto para sobrepasar la rutina, y facebook necesita de esto para aumentar sus usuarios (por ende, ganancias).
[…] ¿Nos estamos volviendo locos? […]
[…] El miedo a lo desconocido y la desinformación […]
[…] Calderón en una entrada para alt-tab […]