Durante más de treinta años, el TrackPoint ha sido un distintivo de las ThinkPads, una herramienta que simboliza eficiencia y productividad. Odiado por tantos, y amado por algunos menos (entre los que me incluyo). Ese pequeño botón rojo que permite navegar con bastante buena precisión sin despegar las manos del teclado ha sido fiel compañero de quienes buscan comodidad y rapidez. Sin embargo, parece que su vigencia está llegando a su fin.
Con la presentación del ThinkPad X9, Lenovo introdujo un cambio realmente significativo: por primera vez, no incluye el trackoint y hace la apuesta por un touchpad háptico más moderno y minimalista. Este movimiento no solo marca un cambio en el diseño, sino también en la filosofía de las ThinkPads, que históricamente han priorizado funcionalidad por encima de tendencias estéticas.
Trakpoint: Un detalle (y un ícono) que asociámos a una marca
Para muchos, el TrackPoint siempre ha sido más que un accesorio. Era una forma de manejar la PC sin sacar las manos del teclado, algo que usuarios cómo yo – que escriben bastante – siempre hemos agradecido. La realidad es que en un mundo donde los touchpads tradicionales, por grandes que sean, todavía no igualan la capacidad del Trakpoint para tareas detalladas. Desde redactar documentos hasta navegar en hojas de cálculo gigantescas, el diseño del botoncito rojo siempre nos pareció (a los que lo usamos) verdaderamente insustituible.
Además, este «joystick» integrado siempre tuvo su encanto retro, una reminiscencia de las ThinkPads de los años 90, cuando estos portátiles eran la herramienta de los profesionales más exigentes.
Pero la tecnología avanza, y con ella cambian las prioridades de diseño. Hoy los fabricantes buscan dispositivos más finos, elegantes y compatibles con los gestos multitáctiles, características que el touchpad háptico ofrece de manera natural. Además, los estudios de mercado podrían estar indicando que las nuevas generaciones no ven el TrackPoint como una necesidad.
Lenovo argumenta que este cambio busca satisfacer las demandas de un usuario más moderno. Pero la pregunta sigue siendo: ¿se puede sacrificar algo tan icónico sin alienar a la base fiel de usuarios que ha sostenido a la marca durante décadas?
El dilema del usuario fiel
Para quienes hemos utilizado el TrackPoint durante años, ver que la marca comienza su eliminación en algunos modelos es como arrancar el corazón de lo que hace única a una ThinkPad. Más allá de lo funcional, hay un componente emocional. ¿Cómo se siente perder algo que te define como usuario? Para algunos, es como si la marca nos dijera: «Es tiempo de adaptarse o buscar otra alternativa».
Ojo, hay que recalcar que la eliminación del TrackPoint en el ThinkPad X9 no significa su desaparición inmediata en toda la línea ThinkPad. Modelos clásicos como el X1 Carbon o la serie T siguen incorporándolo. Pero este cambio podría ser un indicador de lo que está por venir: un futuro donde la tecnología háptica reemplace las herramientas tradicionales que definieron una época.
¿Qué pensás vos, querido lector? ¿Es el TrackPoint una reliquia del pasado que merece descansar o deberíamos defenderlo como símbolo de productividad? La decisión de Lenovo podría marcar el comienzo del fin de esta herramienta tan curiosa como querida para varios de nosotros.
Hace años que Lenovo esta intentando que la gente deje de asociar el trackpoint a las thinkpad, pero su base de usuarios se lo ha hecho bastante dificil, por eso sacaron lineas paraleas como las Thinkbook que buscan atraer a un publico mas joven y menos acostumbrado a estos detalles sin dañar la expectativa de la marca. En este caso en particular, creo que el objetivo de estos modelos es tener una thinkpad que compita en el mercado de las macbooks, los modelos X9 son la version thinkpad del exitoso Yoga Slim 7i Aura edition, que imita el la forma de las macbook air pero conservando la mayoria de las ventajas de los equipos con windows. Creo que si no fuera por el precio que al parecer es bastante elevado(arriba de los 2000usd el modelo base) serian una alternativa exepcional.