Si existió un reproductor multimedia que realmente rompió todos los esquemas en la computación personal, fue Winamp.
Pongámonos un poco más de contexto: Se creó a finales de los 90’s (más específcamente, 1997) cuando lo único que hacía la gente cuando quería escuchar música era comprarla (en cassete y en el mejor de los casos, CD), Internet era todavía muy costosa y de acceso limitado pero ya se podían comenzar a descargar algunas canciones en formato MP3 gracias a Napster. Ah, y también las interfaces apestaban.
Fueron varias las chispas que anunciaban una revolución que desencadenó en un programador, aburrido en su casa, programe una de los softwares más fantásticos de la historia. Porque Winamp fue muchísimo más que un programa y se transformó un ícono de la cultura millenial al suponer un «emulador de equipo de audio» que todos los que hoy tenemos más de 30 años usamos más de una vez.
Años dorados para Winamp fueron los 2000’s. Se puso de moda la banda ancha, las grabadoras de CD eran más y más baratas y además de todo eso existtía programas cómo Audigalaxy Satellite, Kazaa y Ares que llevaron la música a las masas y con eso pasó algo que, 10 años atrás, creíamos que era algo realmente imposible: la música se había convertido – en la mente de las personas – en algo gratuito.
Todo tiene un final, todo termina
Hasta uno de los mejores programas de la historia deja de ser importante para los usuarios. Y es que, a partir de la salida de Youtube y Spotify, mucha gente comenzó a sentir que ya no era necesario descargar la música que le gustaba ya que la música – ahora gratis fumándose un poco de publicidad – ya «estaba» en Internet. Y no solamente que estaba, sino que estaba toda y no era necesario ningún esfuerzo para tenerla.
Así que 2013 en este mismo espacio, AOL (que había comprado Winamp) lo mató, y nosotros escribimos el obituario.
En plena cresta de la ola de la era post-PC es muy probable que muchos jóvenes no tengan idea de lo que significó Winamp para los que, hace muchos años, ni siquiera concebíamos la posibilidad de escuchar música con una computadora. La aplicación creada por Justin Frankel casi cómo un hobby luego de dejar la Universidad fue un boom instantáneo. Cuenta una Wired que tengo en un cajón que Justin trabajó durante un verano casi entero con una sola idea en la mente: emular un equipo de audio en una computadora hogareña y lo hizo. Dicen que solo salía para comer cuando su madre no paraba de golpearle la puerta de su cuerto o para salir, esporádicamente, con quién entonces era su novia.
Allá por 1998 eran épocas doradas de la informática. Comenzaban a venderse las PC’s con los “kit’s multimedia”, las canciones comprimidas en formato MP3 comenzaban a esparcirse por algo nuevo que se llamaba Internet a través de una re de intercambio llamada Napster. Era una revolución increíble, casi mágica, y Winamp tomó la posta como el reproductor de música. Punto.
Junto a Tom Pepper, quién había tomado un rol importantísimo en el desarrollo del programa, Justin creó Nullsoft, empresa que además de Winamp tenía otros proyectos en mente, algunos lograron ser muy fructíferos como Shoutcast (una aplicación para hacer streaming todavía usada por muchas “radios amateurs”) y Gnutella, una aplicación P2P que supo tener cierto éxito en la época dorada del P2P puro y duro. Por entonces Winamp era distribuido cómo “shareware” y Nullsoft recibía miles de dólares al mes por la compra del producto.
Tal fue la fama que llegó a tener este reproductor que varios grandes intentaron poner sus garras sobre él. El que ganó fue America on Line pagando un valor cercano a u$s 60.000.000. El sueño americano se había cumplido otra vez y aquel programador que dejó la universidad y se encerró un verano a emular un equipo de audio era multimillonario.
Winamp 5.9: Lo bueno vuelve, a veces
Cuando en 2018 se filtró la versión beta de Winamp 5.8, muchos nos alegramos ya que estábamos ante la primera versión de Winamp lanzada por Radionomy, su dueño «post AOL». Esta versión tenía muchas mejoras y cambios en la compilación filtrada, incluida la compatibilidad total con Windows 10 y Windows 8.1. Además pasaba a ser completamente gratuita (antes hubo una versión PRO que fue discontinuada porque… ¿quién pagaría por un Winamp PRO? Quizás el que paga por WinRAR PRO…)
Y ahora resulta que, 4 años después de la versión 5.8, se lanzó la beta de Winamp 5.9, una versión escrita en VS2019 con muchas mejoras «bajo el capó» pero que a ojos de cualquier hijo del vecino es lo mismo. También se conoce que la versión final tendrá soporte nativo para formatos opus, ogv/ogm, TS, H.265, HLS y VP9, entre otros.
El tema es el siguiente: ¿Alguien se bajó Winamp para volver a usarlo?
Yo, y eso que lo amo con locura, no lo he hecho. Quizás algún friki sí, pero por nostalgia.
Así que sí, Winamp vuelve a estar vivo, pero lamentablemente, a nadie le importa.
La única forma de salvar al Winamp sería si te permitiera agregar tus suscripciones (Spoti, YTM, etc) concentrando todo en una sola «plataforma», pero más que nada para revivir ese lado retro que todos tenemos, la interfaz claramente quedó en los 2000.
Hay como cierto revival nostalgico en el que parece que se extraña todo lo de antes, casettes, vhs, los 80, los 90, pareciera como que no se esta tan a gusto con todos los reemplazos de esas tecnologias, pero cuando vuelve un programa que todos usabamos antes, ahora resulta que a nadie le importa, porque la necesidad no esta mas…
En fin, parece que es solo nostalgia (que vende mucho).
Todo cambio y todo se recontrasimplifico. Hoy todo lo tenemos regaladisimo y hoy todo es hiper facil. No hay desafios para nadie, vivimos en una era donde todo esta hecho. Ahi es donde el negocio de la nostalgia viene a llenar un hueco.
A los centenialls y alphas les importa un bledo esto. ¿Quien va a ver como era antes, cuando todo estaba por hacerse? Solo los que estan en el palo de la informatica, para conocer el pasado y como llegamos a nuestros dias unicamente. Los demás, ya dan por sentado todo lo que existe, solo cliquean y usan.
Lo baje hace no mucho por nostalgia, porque la poca musica que escucho en la pc es directa de spotify. Tiene todo lo que lo hizo encantador en los 2000 y toda la UX de un programa de su epoca…
Si bien Winamp era un todo terreno, le daba mas uso al musicmatch jukebox para convertir a mp3 todo cd que daba vueltas por mi entorno.
Como amantes de la tecnologia, tenemos que estar a favor del progreso, de los cambios y de los reemplazos tecnologicos, aunque no estemos de acuerdo con todos…
Tengo una pc con Windows Millenium, tengo muchos mp3 en ella, la utilizo con mis bocinas altec lansing para la musica, y por supuesto con Winamp 3.
Ahhhh la skin de Pioneer que recuerdos!!!
Si soporta nativamente flac tiene una chance en mi PC.
Que feo el titulo «a nadie le importa» como directo a destruir. Winamp es un clásico, un poco de respeto.
César, si lees bien el artículo vas a entender mi fanatismo por el software de Justin Frankel.
Pero la unica verdad es la realidad, y ahí es donde a la inmensa mayoría de la gente le chupa un huevo si Winamp lanza una nueva versión.
Te mando un abrazo.
Tengo muchísima música en mi PC, no uso streaming. Tengo a full el Winamp 5.666.
Creo que me anoté para que me avisen el lanzamiento, pero no me enteré. Ahora me fijo.
Gracias por el dato.
Siempre tengo guardada de forma local una discografía mínima y sin compresión, pero es cierto que ya no es necesario con tantos servicios online.
No probé esta versión de Winamp, pero uso Audacious con los skins de Winamp que son compatibles para ambos reproductores.
Hay una colección de skins acá por si a alguno le interesa: https://skins.webamp.org/
Igualmente, le tengo un poco más de cariño a MusicMatch… noches enteras ripeando CDs originales y qué buen reproductor que era por lo menos hasta la versión 7.5 si mal no recuerdo.
Sigo usando el 2.91
AIMP se puso la mochila al hombro con la desaparición y se mantuvo. Y ahora no lo cambio por nada. Amé winamp, pero como dice el artículo, «Todo tiene un final, todo termina».