Simuladores de automovilismo: un mundo de muchas vueltas

Tengo muchas pasiones, aunque quizás una de las más grandes son sin dudas, los fierros.

Los fierros para mí han sido una pasión que fue heredada de mi viejo, el cual se ocupó de llenarme de memorias de muy chico: desde cumpleaños en el Gálvez para ir a ver las picadas, ir a ver el TC, soñar con correr en kart, imaginar que era Traverso dentro del Ford violeta con los logos de Oca o llegar a saberme la obertura de Carmen y el himno Alemán de ver todos los fines de semana a Schumi ganar y ponerme muy triste cuando eso no pasaba (que por suerte era poco).

La carencia de un nivel económico que me permita poder competir en alguna categoría amateur del automovilismo y mi afinidad para con la tecnología/juegos me llevaron a un día empezar a leer sobre el mundo de los simuladores de automovilismo para PC. Como todo buen usuario que no sabe nada, lo primero que hacía fue juzgar “esto no puede ni acercarse a la realidad”. Luego fui entendiendo que si bien no iba a experienciar fuerzas G como se pueden experienciar en un auto, ni tampoco iba a sentir el olor del fierro caliente o el caucho clavado en el asfalto, la conducción en un simulador no era para nada simple y dentro de sus posibilidades estaba bastante cerca de conducir un automóvil real, bajo circunstancias reales.

Averigüé mucho sobre el submundo dentro de los simuladores, que es el de los volantes, el cual nos podría llevar otra nota entera y no profundizaré, y terminé adquiriendo un flamante Logitech G27, al cual le armé toda una base de madera para tener una posición de manejo lo más cercano a la realidad, tanto en altura de volante, palanca de cambios y pedalera.

Tipos de simuladores

Antes de enumerar los distintos simuladores, hay que hacer una aclaración, y es que existen dos tipos de simuladores: los simuladores puros y los simuladores arcade.

El simulador puro busca la realidad más exacta posible en cuanto a las físicas, a fin de llevar al conductor a límites en los que incluso puede haya autos que sean realmente imposibles de controlar. Este tipo de simuladores están, en su mayoría, 100% orientados a la competición (Se puede incluso encontrar a pilotos profesionales tales como Rubens Barrichello, o jugadores que han ido a probarse a circuitos y han hecho tiempos incluso mejores que pilotos profesionales.

Ah… Si te picó el bicho de la curiosidad, mirá esto después de la nota (o podés abrirlo ahora en una nueva pestaña, pero seguí leyendo).

Para dar un ejemplo: todos ellos poseen sistemas de pistas/circuitos de asfalto dinámico, donde el mismo va cambiando a medida que los autos pasan, ya sea calentándose, enfriándose, ensuciándose o marcando la trazada. Y casi el 100% de estos circuitos fueron escaneados con láser a fin de replicar lo más exacto posible cada bache, cada desnivel, cada piedra que está en el circuito. A fin de conseguir esa perfección en las físicas, suelen resignar detalles tales como los gráficos o una variedad más amplia de contenidos.

Por otro lado, el simulador arcade es un tipo de simulador más orientado al usuario “gamer” que tiene un interés por los autos y ya. Posee una enorme cantidad de contenidos, incluso algunos poseen modo historia, unos gráficos que deslumbran, pero su conducción suele ser contra una IA que bastante deja que desear y unas físicas que lejos están de la realidad. Para dar un ejemplo: en muchos de estos juegos uno puede pisar pianos acelerando a máxima potencia y que el auto se mantenga estable.

¿Es uno mejor que el otro?

En absoluto, eso depende de las intenciones que tenga uno para con el juego, yo he competido en simuladores puros y la he pasado tan bien como corriendo en un asombroso Nürburgring arriba de un Lotus 98T con ningún sentido de las físicas.

Entonces pibe, ¿Qué simulador me recomendás?

Para lo que sería Simulador Arcade hoy por hoy el mercado está dominado por Project Cars y acompañado de lejos (debido a que es más orientado al otro tipo de sims) por Assetto Corsa.

Project Cars es un juego que hagas lo que hagas, pienses como pienses, te va a deslumbrar con los gráficos y con la absurda cantidad de contenido base tan bien hecho. Es un simulador para correr sólo durante horas y no darte cuenta que pasaron. La IA de este juego deja bastante que desear, no porque no puedas terminar una vuelta sin un choque, sino porque apenas le agarrás la mano, pasar a la IA es excesivamente fácil.

Assetto Corsa es un juego que está en el medio, entre sim puro y arcade, pero elijo ponerlo de este lado ya que no ofrece un buen servicio de multijugador para poder competir y las IA son desastrosas. Las físicas de este juego son variables, aunque tienen una buena tendencia a ser bastante reales. ¿Y por qué tanta varianza? Porque es el juego que mas admite y más tiene mods para agregar circuitos, coches, skins, absolutamente todo. Tiene una comunidad de developers enorme que suben trabajos excepcionales, y trabajos que nunca superan la beta y terminan siendo divertidos, pero incompletos al fin y al cabo. Ambos se pueden conseguir en la plataforma Steam.

El rey de los simuladores es sólo uno

Para lo que es simulador puro, actualmente hay un único y absoluto rey que es Iracing. Es un juego hecho desde su mismísima base para ser un juego competitivo. Las físicas de este juego son lo más real que se ha visto en la historia de los sims, tiene sistemas donde realmente se regula y penaliza a los malos conductores, ya sea por falta de talento o por enojarse y chocar a otro porque sí. En este sim vas a aprender a correr (y si te queda alguna duda, mirá más arriba que en un momento te tuvo que haber picado la curiosidad de abrir el link que dejé) y si sos competitivo, vas a viciar a más no poder para ir obteniendo mejores licencias y llegar a correr en NASCAR si te gustan los circuitos ovales, que dicho sea de paso están bastante infravalorados, o podrás llegar a correr en F1.

Este se puede conseguir desde su página oficial, tiene un costo bajo inicial donde te dan un pack de contenido básico y se maneja con suscripción. A medida que vas avanzando, tenés que ir comprandote los fierros que más te gusten para cada categoría, y el costo de cada adicional suele rondar entre los 5 y los 15 dólares, por lo que es un vicio que no es ni barato, ni totalmente caro (con algunos autos podés correr más de una categoría y torneo).

Automobilista: la promesa

Por último, quisiera destacar un juego que actualmente se encuentra en desarrollo pero que promete mucho a futuro en su modalidad híbrida tanto competitiva como arcade, presentando unas físicas increíbles y una cantidad de contenido absurdo para ser un juego en desarrollo. El sim es “Automobilista” y me ha dejado con muy gratos sentimientos hacia él, sobretodo por tener el circuito de Buenos Aires y con un plan ya presentado de futuros DLCs (que pueden incluso adquirirse ahora a bajo precio) que prometen mucho.

El único problema que le encontré, es que este al estar en desarrollo no posee muchas licencias y no tiene circuitos típicos como Spa, Monaco, Monza y etcéteras. Pero en caso de que le vaya bien, cosa que es bastante probable, no creo que tenga problemas en llegar a conseguir las licencias.

Disculpen por el largo post, pero creanmé que podría haber sido ampliamente más extenso. Cualquier duda que tengan la dejan en los comentarios así podremos charlar al respecto, aunque en breve volveré hablando de ésta y mis otras pasiones, como la fotografía.